El día solo tiene 24 horas. Si quieres tener éxito en tu carrera o trabajo, debes buscar maneras de reducir el tiempo que dedicas a las labores de la casa.
43% de las latinas, aquí en los Estados Unidos, están dedicando más de cinco horas diarias a las labores de casa o al cuidado de un familiar, mientras trabajan tiempo completo. Esto está llevándolas a que experimenten cansancio extremo o a que no tenga suficiente flexibilidad en su trabajo.
Si bien, muchas de estas actividades son inevitables, como latinas, a veces tenemos estándares muy altos. Personalmente, me di cuenta que quería tener mi casa siempre como una tacita de porcelana y como consecuencia me la pasaba limpiando y limpiando por horas seguidas, sin darle prioridad a descansar y recargar baterías.
A continuación, verás algunas recomendaciones para alivianar y distribuir las cargas:
1. Delega y asigna tareas a otros. Por ejemplo, cada quien debe organizar y limpiar su cuarto. Las áreas familiares o compartidas deben ser responsabilidad de todos. Crea un horario para que los miembros de la familia se tomen turnos limpiando las áreas comunes.
2. Establece un horario para ti misma. Escoge solo un día a la semana para hacer limpieza profunda. Los otros días de la semana, solo dedica 30 minutos diarios a hacer mantenimiento.
3. Come más frutas y verduras. Estas se pueden comer crudas o cocinadas al vapor por tan solo unos minutos, lo cual reducirá el tiempo que pasas en la cocina. Además, son alimentos saludables.
4. Crea un menú estable para cada día de la semana y repítelo cada semana. Así no tendrás que estar pensando cada día en que vas a cocinar. Esto también te llevará a comprar siempre la misma lista de víveres, reduciendo el tiempo para planear y comprar.
5. Adopta un estilo de vida minimalista, teniendo solo la cantidad necesaria de ropa y zapatos al igual que cosas en tu casa. La clave es eliminar el exceso. Esto hará más fácil seleccionar la ropa que vas a usar cada día. También facilitará la organización de tu closet al igual que la organización de los espacios en tu casa. Piénsalo, entre más cosas tengas, más tendrás que organizar y limpiar.
Recuerda, tu casa no es un hotel ni un restaurante. Así que no se tiene que ver, ni sentir como tal. No te empujes hasta alcanzar tu límite.
¡Quiérete cuídate!
Foto de Anh Nguyen en Unsplash